Etanol celulósico – Lo básico: Ruta de conversión – Bioquímica


Serie: Etanol celulósico
- Lo básico: Ruta de conversión – Bioquímica

1. Introducción

El proceso de conversión bioquímica ha sido el que ha generado mayor atención debido a sus similitudes con el proceso utilizado para producir etanol a partir de maíz. Como se puso de manifiesto en la primera entrada de esta serie, el proceso de producción de etanol a partir de materias primas celulósicas requiere descomponer la materia prima en azúcares fermentables a través de tecnologías innovadoras en forma de pretratamiento e hidrólisis. Los pasos restantes son similares a los utilizados en las plantas de etanol convencionales.

2. Pretratamiento

El pretratamiento es el primer paso en todos los diferentes procesos disponibles para la ruta de conversión bioquímica, pero la definición de esta unidad de operación es vaga. El pretratamiento hace que la biomasa lignocelulósica sea más propensa a la conversión biológica, lo que garantiza un uso completo del sustrato. La resistencia a la descomposición química y biológica de la biomasa lignocelulósica se conoce como recalcitrancia. Depende de varios factores: estructura cristalina de la celulosa, grado de lignificación y heterogeneidad estructural y complejidad de los componentes de la pared celular. El proceso de pretratamiento altera la estructura recalcitrante de la lignocelulosa: rompe la envoltura de lignina, degrada la hemicelulosa y reduce la cristalinidad y el grado de polimerización de la celulosa.

A nivel comercial, se necesita una sección sólida de pretratamiento para procesar materias primas que varían en calidad y composición. No es posible definir el mejor pretratamiento para toda la gama de materias primas, pero se pueden describir dos características generales clave:
- Debe maximizar la cantidad de azúcar generada a la vez que simplifica el proceso general en la mayor medida posible.
- Debe minimizar la formación de compuestos tóxicos o inhibidores para disminuir el riesgo de efectos negativos en los pasos posteriores.

Se han desarrollado y probado varios métodos de pretratamiento a varias escalas. Se pueden clasificar en las siguientes categorías:
(1) Físicos: trituración, molienda, extrusión, microondas y ultrasonidos.
(2) Químicos: álcalis, ácidos, agentes oxidantes, disolventes orgánicos (organosolv), líquidos iónicos y disolventes eutécticos profundos.
(3) Fisicoquímicos: explosión de vapor (SE) con y sin catalizador, explosión de fibra con amoníaco (AFEX), explosión de CO2, agua caliente en fase líquida (LHW) o hidrotermólisis, oxidación húmeda.
(4) Biológicos: célula completa, enzimáticos.
La combinación de dos o más métodos puede dar lugar a muchas variaciones. En general, el pretratamiento físico es un requisito previo antes de cualquier otro método de pretratamiento.

Caso de estudio: Pretratamiento PROESA
La tecnología PROESA® es la base de la primera planta de etanol celulósico a escala comercial del mundo ubicada en Crescentino (Italia). Originalmente desarrollado por Biochemtex, ahora es comercializado por Versalis (empresa química de Eni).
El proceso de pretratamiento consiste en un paso de cocción "inteligente". Dependiendo de la biomasa y de la limpieza garantizada por el proveedor, el manejo de la alimentación puede incluir una sección de maceración para eliminar restos e impurezas. Luego, el proceso utiliza vapor saturado para romper los enlaces entre lignina, celulosa y hemicelulosa. La tecnología mantiene las principales ventajas de los procesos estándar basados en vapor y agua (sin adición química y separación de celulosa y hemicelulosa de alta eficiencia) al tiempo que reduce la formación de inhibidores en los procesos posteriores.

3. Hidrólisis y fermentación

Después del pretratamiento, la hidrólisis utiliza enzimas o ácidos para descomponer las cadenas complejas de las moléculas de azúcar de la celulosa y las hemicelulosas en azúcares simples en preparación para la fermentación. Este paso también se denomina sacarificación. La hidrólisis dará como resultado glucosa (azúcares C6) y xilosa (azúcares C5). Actualmente, la hidrólisis enzimática puede ser la mejor opción económica. En comparación con la hidrólisis ácida, es más rápida, produce mejores rendimientos y utiliza menos aporte químico.

La eficiencia de la hidrólisis depende en gran medida de la efectividad del pretratamiento. Si el tratamiento previo deja una gran cantidad de lignina, el rendimiento en azúcares simples de la hidrólisis puede reducirse. La presencia de lignina evita que las enzimas se hidrolicen. Es posible cambiar algunas características de la lignina para hacerla más compatible con el proceso de hidrólisis.

El proceso se parece a la hidrólisis del almidón en la producción de etanol de maíz, pero su complejidad es mayor. A diferencia de las amilasas y glucoamilasas que están disponibles a precios bajos para la hidrólisis de almidón, las celulasas para la hidrólisis de celulosa son mucho más caras. La hidrólisis de almidón solo requiere una familia de enzimas, mientras que la hidrólisis de celulosa requiere que varias familias rompan los polímeros de celulosa y hemicelulosa.

Después de que el pretratamiento y la hidrólisis hayan liberado azúcares simples, la fermentación se utiliza para convertir la mayor cantidad de azúcar posible en etanol. Los azúcares C6 se pueden fermentar con cepas de levadura tradicionales. Los C5 no se fermentan tan fácilmente. "Co-fermentación" significa que el organismo puede fermentar simultáneamente glucosa y xilosa en etanol.

Se pueden distinguir tres estrategias para abordar la hidrólisis y la fermentación:
(1) Hidrólisis y fermentación (SHF) separadas (o secuenciales)
La hidrólisis enzimática se inicia mientras la suspensión aún está a una temperatura elevada después del pretratamiento y el acondicionamiento. A esta temperatura, la actividad enzimática es mayor. Una vez que se completa la conversión de celulosa en glucosa, la suspensión se enfría a la temperatura de fermentación y se inocula con el microorganismo fermentador.
(2) Sacarificación y co-fermentación simultáneas (SSCF)
La temperatura de la suspensión se reduce y la fermentación se inicia antes de que se complete la hidrólisis enzimática. En SSCF, la enzima continúa hidrolizando la celulosa incluso después de que comience la fermentación.
(3) Bioproceso consolidado (CBP)
Las celulasas se producen y añaden para hidrolizar la celulosa para la producción de etanol en SHF y SSCF. En la naturaleza, algunos microbios pueden sintetizar y excretar celulasas para hidrolizar la celulosa como fuentes de carbono y energía para apoyar su crecimiento y metabolismo. Esto inspira a los científicos a diseñar sistemas de imitación que combinen la producción de celulasas, la hidrólisis enzimática de celulosa y la fermentación de etanol de los azúcares resultantes.

Figura 1. Diagrama de la producción de etanol celulósico para las tres estrategias: (a) SHF, (b) SSCF y (c) CBP (extraída de la Referencia [6])

Caso de estudio: hidrólisis y fermentación Sunliquid®
Sunliquid es una tecnología desarrollada por Clariant para despejar el camino hacia los biocombustibles celulósicos. Su proceso convierte los residuos agrícolas lignocelulósicos, como la paja de cereal, en etanol celulósico u otros productos químicos biobasados.
El proceso utiliza una estrategia SHF:
- Una mezcla enzimática hidroliza las cadenas de celulosa y hemicelulosa para obtener monómeros de azúcar. Las enzimas están altamente optimizadas en función de la alimentación y los parámetros del proceso, lo que resulta en rendimientos máximos y tiempos de reacción cortos.
- Utilizando microorganismos optimizados en un único paso se transforman simultáneamente los azúcares C5 y C6 en etanol, generando hasta un 50% más de etanol que los procesos convencionales que trabajan únicamente con azúcares C6.

4. Separación y recuperación de lignina

La destilación es una tecnología bien establecida, ya que se utiliza en la producción de etanol convencional. Son necesarios dos pasos intensivos en energía para obtener etanol purificado (95,63% en masa) a partir del azeótropo binario etanol-agua. El primer paso es una destilación estándar que concentra etanol hasta el nivel de 92,4-94% en masa. El segundo paso implica la deshidratación de etanol para obtener un etanol anhidro.

Para reducir el consumo de energía de la destilación convencional, las técnicas de membrana han llamado la atención como alternativa gracias a una serie de ventajas que las hacen atractivas para la separación de mezclas líquidas. Tienen una alta eficiencia de separación, los costes de energía y operación son relativamente bajos, no producen corrientes de residuos.

La lignina se ve tradicionalmente como un material residual o un subproducto de bajo valor para quemar. En las plantas de etanol celulósico a menudo se usa la lignina residual para la generación de energía que cubra las necesidades de la fermentación. Por lo general, se recupera una suspensión de lignina acuosa en la parte inferior de la unidad de destilación y se envía a la sección de recuperación y valorización de la lignina.

Sin embargo, para mejorar la viabilidad económica de la producción de biomasa celulósica a partir de biomasa, es importante agregar valor a la lignina producida. La investigación de nuevos métodos para la extracción eficiente y rentable de lignina está muy activa. Este tema será estudiado en futuras entradas.

___________________________________________________________________________________________________________________________________________________ 
Referencias
[1] Randy Schnepf (Coordinador): “Cellulosic Ethanol: Feedstocks, Conversion Technologies, Economics, and Policy Options”. Congressional Research Service, 7-5700, R41460, October 22, 2010.
[2] D. Humbird et al.: “Process Design and Economics for Biochemical Conversion of Lignocellulosic Biomass to Ethanol”. Technical Report, NREL/TP-5100-47764, May 2011.
[3] F. Cotana et al.: “Lignin as co-product of second generation bioethanol production from ligno-cellulosic biomass”. Energy Procedia 45 (2014) 52 – 60.
[4] A. Bušić et al.: “Bioethanol Production from Renewable Raw Materials and Its Separation and Purification: A Review”. FTB, July-September 2018, Vol. 56, No. 3.
[5] J. Baruah et al.: “Recent Trends in the Pretreatment of Lignocellulosic Biomass for Value-Added Products”. Frontiers in Energy Research, December 2018, Volume 6, Article 141.
[6] Chen-Guang Liu et al.: “Cellulosic ethanol production: Progress, challenges and strategies for solutions”. Biotechnology Advances, Volume 37, Issue 3, May–June 2019, Pages 491-504.
[7] Galbe and Wallberg: “Pretreatment for biorefineries: a review of common methods for efficient utilisation of lignocellulosic materials”. Biotechnol Biofuels (2019), 12:294.
[8] Monica Padella, Adrian O’Connell and Matteo Prussi: “What is still Limiting the Deployment of Cellulosic Ethanol? Analysis of the Current Status of the Sector”. Appl. Sci. 2019, 9, 4523; doi:10.3390/app9214523, 24 October 2019.
[9] M.A. Mitchell: “The sunliquid® Process: Bringing New Proven Solutions for Commercial Cellulosic Ethanol Production”. Presentation, Bio World Congress 2017, Montreal, (Canada, July 25, 2017.
[10] Minna Yamamoto: “St1 Cellunolix® process – Lignocellulosic bioethanol production and value chain upgrading”. Presentation, Bio4Fuels Days, October 12th 2018, Oslo.
[11] “PROESA proprietary process technology”. Versalis technical information.

Popular Posts

Biofuels from algae

Hidrotratamiento (HVO) – Conceptos, materias primas y especificaciones

Biorrefinerías de ácido levulínico

Etanol celulósico – Lo básico: Conceptos y materias primas

Gasificación de licor negro: El caso de Chemrec y la LTU