La startup española Venvirotech cierra una ronda de financiación de 11 M€ para lanzar sus bioplásticos PHA a principios de 2022
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La startup española Venvirotech, especializada en la producción de bioplásticos de tipo polihidroxialcanoato (PHAs) a partir de residuos orgánicos, ha cerrado una ronda de financiación de 11 M€. Los nuevos fondos permitirán a Venvirotech acelerar su plan de crecimiento en España y ampliar su plantilla.
Noticia en Cinco Días: “La española Venvirotech capta 11 millones para lanzar en enero un bioplástico biodegradable”, 13/07/2021.
Figura 1. Granza de PHA, un tipo de poliésteres biodegradables producidos por bacterias (imagen tomada de la página web de Venvirotech)
La operación, una de las de mayor importe en el sector biotecnológico en España en lo que va de año, ha sido liderada por un inversor industrial, cuyo nombre no ha sido revelado, y ha contado por la participación de un grupo de seis business angels, el family office de la familia Gassó y Giribets 2000. La empresa, creada en 2018, ha captado hasta la fecha 15 M€.
La empresa cuenta con un doble modelo de negocio:
- Gestión de residuos orgánicos de empresas de forma modular a través de la fabricación e instalación de contenedores (llamados Ve-Box) en industrias alimentarias y generadoras de residuos orgánicos. En un ciclo de 24 horas, los residuos entran en el contenedor, donde bacterias se alimentan y engordan, generando el bioplástico en su interior. Gracias a la innovación en la gestión modular allí donde se generan los residuos, se reducen los costes de transporte y manipulación.
- La extracción y formulación del bioplástico presente en las bacterias para transformarlo en un material con las mismas propiedades que el PP o el PE. La biomasa se centrifuga para extraer el agua y el lodo restante se lleva a la planta de extracción industrial de VEnvirotech, donde se extrae el bioplástico y se formula de forma que tenga unas características y prestaciones concretas.
Venvirotech tiene ya instalados sus contenedores en tres empresas: BonÀrea, Nestlé y Calidad Pascual. Escalando estos tres contratos a la máxima capacidad industrial, el negocio ya es rentable. La startup pretende lanzar el producto en enero de 2022 y, a dos años, el objetivo es producir más de 20 ktons de bioplástico revalorizando más de 200 ktons de residuo orgánico.